Perdida en el Universo
Solo las muñecas pierden la cabeza nosotras perdemos el corazón, donde ese corazón que no late y esa espuma de cerveza que se deshace en mis manos rebajando el calor ahuyentas esa ardiente sensación. La hechicera quiere entrar al universo por el resquicio entre un millón de estrellas se alza el pozo y el agua cae afuera y se derrama en tu pecho algo parecido a la ambrosia de antaño